Una energía respetuosa con el medio ambiente

La energía eólica de media potencia es una fuente renovable respetuosa con el medio ambiente. El empleo de los recursos del viento más allá de los grandes parques permite extraer al máximo toda su capacidad de generación eléctrica y contribuye, a su vez, a reducir las emisiones de CO2.

Se trata de una energía limpia, inagotable, que no contamina, suprime la dependencia energética de los combustibles fósiles y retrasa su agotamiento. Además, cuenta con una tecnología totalmente madura y puesta a punto para aprovechar los recursos eólicos.

Mediante el empleo de aerogeneradores de media potencia se genera electricidad sin combustión ni transformación térmica, evitando de esta manera la contaminación subyacente a todos estos procedimientos. No genera residuos, vertidos o grandes movimientos de tierra.

Con este tipo de energía no se produce ninguna alteración sobre los acuíferos, ni gases tóxicos que elevan el efecto invernadero. Es un proceso de generación eléctrica que no origina productos secundarios peligrosos ni residuos contaminantes.

Cada kW/ h generado por energía eólica en lugar de carbón evita:

0,60 kg de CO2, dióxido de carbono
1,33 kg de SO2, dióxido de azufre
1,67 g de NOx, dióxido de nitrógeno

La electricidad producida por un aerogenerador elimina la quema diaria de miles de litros de petróleo o carbón en las centrales térmicas.